Las algas son organismos vegetales unicelulares que pueden desarrollarse y multiplicarse rápidamente en el agua, sobretodo cuando su temperatura es templada.
Dosificación y modo de empleo:
- Tratamiento inicial: adicionar 2 litros de antialgas por cada 100 m³ de agua.
- Tratamiento de mantenimiento: añadir una vez por semana 0,5 litros de antialgas por cada 100 m³ de agua.
- El tratamiento inicial se podrá repetir siempre que se aprecie una falta de transparencia en el agua.
- Verter la dosis necesaria en un recipiente con agua y repartir dicha solución sobre la superficie de la piscina por un igual, preferentemente al atardecer y sin la presencia de bañistas.
- Estas dosis son de carácter orientativo, y pueden ser modificadas en función de las características propias de cada piscina, climatología, etc.